27.9.03

Nunca, jamás y siempre (de agustina a anit, de anit a agustina, de ella a ella y de mi a mi)

Mirame. Mírame, por favor. Soy la misma de antes, jamás te abandone. Jamás me fui a ningun lado y nunca me voy a ir. Mirame, anit, estoy acá. Mirame, si? No te das cuenta... hace tanto tiempo que me estas ignorando y nunca me dijiste porqué. Nunca me fui. Siempre estuve acá, cerca tuyo. Eras vos la que estaba perdida, dormida o mirandose los pies. Te llame muchas veces, pero nunca te diste vuelta para ver quien gritaba tu nombre. No escuchabas? No querías escuchar?
No te entiendo. Nunca te entendí y no creo que pueda hacerlo hoy. Ne bis in idem. Identidad de la persona, identidad del objeto, reglas a las excepciones (y nunca, nunca jamás de los jamases, una excepción a la regla), principios falsos, premisas escondidas, lógica barata, y una sonrisa.
Mirame. Acá estoy. No me ves? No me querés ver? Porqué me haces esto? Soy una parte tuya, tan tuya como vos mía. Mirame. Mirame, por favor. Un ratito nada más. Dejame salir, dejame volver a respirarte. Mirame. Mirame sólo una vez. Nunca nos vamos a separar, siempre vamos a estar una adentro de la otra. Cuanto mas quieras matarme más fuerte voy a ser. Mirame, anit. Mirame por favor.

No se porqué él dice que es tonto. Dice que es tonto, que mide poco y que tiene la nariz rara. Dice que solo entiende las cosas por comparación, que se defiende lastimando, y que se ríe para no llorar. Vos le decís que eso no es ser tonto, que eso es ser una persona y que a vos su nariz te gusta así como está. Y èl, èl no contesta. Desaparece, se va, se pierde. Aunsente. Siempre ausente. Si me dejaras ser vos aunque sea una vez más, le diría todo eso que vos no le podes y no le querés decir. Le diría todas las cosas que guardas en tu cabeza: secretos y silencios amargos. Y no me importaría que te enojaras conmigo por eso. No, no me importaría. A veces las cosas hay que decirlas, aunque duela, y eso es algo que vos todavía no entendiste.

Acá adentro sólo somos dos. Vos sos la que tiene miedo y yo soy la que no. No hay nadie mas que vos y yo en esta habitación azul. Ninguna de las dos puede salir y nadie más puede entrar. Nadie entra porque no los dejas, no porque no quieran hacerlo. Nunca dejaste que nadie entrara. No dejaste que te quisieran demasiado tampoco, ni que supieran lo que en realidad querías. Si me dejaras volver a ser vos dejaría que los extraños entren. Especialmente dejaría que èl, a quien nunca le permitirias la entrada, vea lo que realmente sos. Porque lo que vos sos no es ni tan feo, ni tan preciado, ni tan trágico como siempre decías que era. Y esa es la verdad. Y si èl entra y lo que ve no le gusta, le pediría que se fuera. Sé que vos nunca le pedirías eso. Jamás harías nada para ofenderlo, o alejarlo, aunque se lo mereciera. Y es que tenés miedo, tanto pero tanto miedo. No le temes a lo que èl puede o no puede hacerte. No, anit, no es eso. Le temes a lo que sos, a lo que dejaste de ser y a lo que podrías llegar a ser. Me temes a mi, a esta mitad tuya de la que te ocultas, a la que le mentis y silencias. La verdad siempre queda escondida cuando vos sos vos y no sos yo. Sentir está prohibido cuando vos sos vos. Bajar la defensa es imposible cuando vos sos vos. Todo es una omision cuando vos sos vos. Si me dejarás volver a ser vos un ratito cambiaría tantas cosas. Si me dejarás hablar, ocupar tu boca con palabras, tu mente con pensamientos, tus ojos con lagrimas, tus pulmones con aire. Nunca entendi porque me odiabas tanto. Es porque yo si quiero ser feliz? Es porque sí supe amar alguna vez y vos no? O es porque a mi nunca me importó hacerte llorar? No, nunca entendí porque me odiabas tanto. Sólo supe serle fiel a lo que deseabas.
Fui yo la que te hizo abrir los ojos cuando no poddías ver. Fui yo la que mejor supo cuidar tus secretos el día ese en el que todo se derrumbó. Jamás hice nada para lastimarte, y empiezo a pensar que debería haberlo hecho. La que nos lastima a las dos todo el tiempo sos vos. La que busca la salida de emergencia antes de que empiece el incendio sos vos. Te escapas de lo que no podes controlar y dejas que nos hagan sufrir una y otra vez. Esa no soy yo, esa sos VOS. Nunca entendí tampoco porque somos tan distintas si formamos parte de lo mismo. Porqué vos sos roja y yo azul, o porqué cuando yo me río vos sangras. No lo sé. Jamás entendí, siempre quise entender y nunca logré hacerlo.

A pesar de todo, todavía te quiero. Voy a seguir estando siempre, acá, con vos. Cuando me necesites y cuando no. Cuando te caigas y cuando no quieras respirar más. Ambas sabemos que algún día vas a venir a buscarme. Me necesitas de la misma manera que yo te necesito a vos. Vos no sos si yo no estoy, y yo no podría ser si vos no estuvieras. Cuando me quieras buscar, vas a saber donde buscarme..Estoy ahí, en ese lugar donde somos una sola y no mitades, y coexistimos en paz. Y es que, al final, te guste o no mi hermosa doppelganger, siempre hay algún lugar, por más remoto que sea, en el que los extremos se unen.

Mirame, anit. Mirame, estoy acá.
O es que no me ves?

No comments: