17.2.10

No sé en qué estaba pensando cuandfo te conocí. No sé por qué te creí cuando prometiste imposibles. Imposibles tuyos que no tenien relación alguna conmigo. Traumas y cicatrices de otra vida. Permanecés atado a ese dolor porque es lo újnico que conocés. Sabés donde empieza y termina el mundo viviendo a través de esos recuerdos.
Darte la mano y hablarte de mirar para adelante es exactamente lo mismo que hablarle al aire. Es muy triste que no hayas aprendido a querer. Es muy triste que sigas eligiendo todos los días seguir mirando para atrás, y caminar por Buenos Aires sabiendo lo infinito de tu vacío.
Sé que no es un problema mío. Sé que me pediste que te diera todo y cuando te lo dí me dejaste afuera. No estoy enojada con vos, simplemente me causas la misma impresión que un discapacitado pidoendo monedas en un semaforo. Su discapacidad es física, la tuya es emocional.

No comments: